30 enero 2008

Mujeres de Pastapur

Empiezo el año con algo nuevo, un documental (27 minutos) que filmé en la India en noviembre del 2007 y terminé en La Paz en enero 2008 con el apoyo en la edición de Alfredo “Bis” Ovando y su productora NICOBIS (es decir, toda la familia).

El video fue filmado en aldeas alrededor del distrito de Zaheerabad (Estado de Andhra Pradesh), una de las zonas más empobrecidas de la India, a pesar de su cercanía a Hyderabad, una de las cuatro ciudades tech de ese país, donde se asientan las grandes empresas y proyectos de tecnología cibernética.

Lo que hice allí fue seguir durante varios días a un grupo de mujeres de la casta dalit (antes llamadas “intocables”), campesinas analfabetas que hace diez años se dotaron de instrumentos de comunicación participativa, video y radio, como parte de su lucha por conseguir la autonomía de sus comunidades.

Son mujeres que sufrían una triple discriminación, por su casta, género y condición económica, pero que ahora a través de la comunicación y participación en los asuntos que importan a sus comunidades, se han ganado el respeto de ellas, porque contribuyen en el desarrollo y en el fortalecimiento de la identidad cultural.

24 enero 2008

Nueva Crónica y Buen Gobierno

Bolivia era el país de las publicaciones “Año 1, Número 1”, aquellas que empezaban con entusiasmo, se mantenían un tiempo a puro pulmón, y desaparecían sin dejar rastros. Eso lo sé de primera mano, porque he sido parte de iniciativas que no pasaron de uno o dos números. Eran épocas en que hacíamos la composición de manera artesanal, cortábamos y pegábamos los textos manualmente, compaginábamos los pliegos hasta la madrugada… Y todo para que nadie se tomara la molestia de leernos.

Podría mencionar aquí los títulos de tantas de esas publicaciones, pero sería un esfuerzo estéril, pues ya he olvidado a la mayoría de ellas. Me quedan algunos nombres en la memoria, por razones afectivas más que por otra cosa: Vínculo, Asamblea, Difusión, Trasluz, Zeta

Los tiempos han cambiado, los proyectos de revistas se encaran a veces con el mismo romanticismo, pero con una mayor dosis de pragmatismo. Hay una manera más profesional e institucional de encarar una nueva publicación.

Eso nos demuestra Nueva Crónica y Buen Gobierno, una revista quincenal tamaño tabloide, que destaca por la calidad de su contenido, de sus colaboradores y de su diseño. La publica el Instituto Prisma y la Plural Editores [plural@plural.bo], con Joan Prats, Gonzalo Rojas Ortuste y Fernando Mayorga en el Consejo Editorial, Horst Grebe como Editor responsable, y José Antonio Quiroga como articulador y responsable de la calidad del la revista.

Las veinte páginas de cada edición son ricas en entrevistas, reflexiones, y crónicas sobre política y cultura, pero además incluyen una galería de pintura de un artista invitado para cada número, un texto de valor histórico (La otra orilla), y una sección sobre novedades bibliográficas.

En el número 7 -el primero del 2008- salió un texto que escribí sobre el derecho a la comunicación y las radios comunitarias, con una ilustración hermosa de Carmen Bilbao, cuyas obras son una mezcla de dramatismo y sensualidad.

21 enero 2008

De amores y otros cuentos

Los viajes más cortos se convierten en ocasiones para ver a los amigos que uno no veía en muchos años. En Cochabamba estuve también con Giancarla de Quiroga, que mantiene su actividad de narradora por muchos años y ha decidido, hace poco, poner bajo un mismo techo sus cuentos, publicados en diferentes etapas de su vida literaria, unos ya conocidos en publicaciones periódicas y otros hasta hoy inéditos.

La edición al cuidado de Plural, la mejor editorial de Bolivia, cuenta con 30 cuentos bajo un título en sorna que los une como un hilo conductor: De amores y otros cuentos. Es una suma de narrativa amorosa pero sobre todo fantástica, porque el amor es la anécdota que le permite a Giancarla jugar con la imaginación. La ventaja de tener en un solo lugar cuentos de edades diferentes, es que uno puede comparar la evolución literaria de la narradora y colegir algunas de sus influencias.

La memoria es central en la narrativa de Giancarla de Quiroga. Los personajes y la autora-narradora escarban permanentemente en su memoria hasta encontrar en los olores y sabores y colores los parámetros que permiten devolver al presente los recuerdos. En las vidas de muchos de los personajes de estos cuentos hay un leit-motiv que es el de los ciclos pasados de la vida, el revisitar lo que ya se ha vivido.

Entre todos los cuentos y relatos, hay algunos que destacan por su elevada calidad literaria, su estilo poético y la riqueza del lenguaje. “Una habitación propia en Saint-Nazaire” (dedicado a Marcelo Quiroga Santa Cruz), es como el proyecto de una novela escrita en tono melancólico, como para sublimar una experiencia personal profunda. Más que narrar lo anecdótico desde afuera, lo que este relato hace es mirar hacia adentro.

Entre todos estos cuentos, uno de los que más me gustó fe “Desvelos”, premiado en 1984 por la Universidad Técnica de Oruro. Es un cuento impecable y divertido. En esta canasta de cuentos de Giancarla, que cada uno escoja el que más le guste.

14 enero 2008

Liber Forti

A Liber no le va a gustar aparecer en mi blog, porque no le gusta aparecer en ninguna parte. Pero por lo menos de vez en cuando es importante mencionar a este viejo libertario que nos inspira desde hace mucho tiempo. Su nombre es una leyenda en Bolivia, por muchas razones, en parte por su trabajo en los 1960s y 1970s como asesor cultural de la Federación de Mineros (FSTMB) y de la Central Obrera Boliviana (COB); y también por haber sido el impulsor durante 60 años del Conjunto Teatral Nuevos Horizontes, en Tupiza primero, y luego en todas partes.

A sus ochenta y tantos años Liber es un molino de ideas e iniciativas. Hablar con él es más bien un ejercicio de escuchar, porque Liber no respira cuando habla, es una ametralladora, un volcán en erupción o una ardilla que se sube por un árbol y salta de una rama a otra incesantemente. En ese discurso volcánico y a veces disperso, hay un hilo conductor dominante y es el amor por la vida y por la humanidad.

Liber es de esos anarquistas, como Rafael Barret, que reivindican el amor por encima de todas las cosas. El amor por la vida, por el arte, la educación por el arte, el legado de humanismo profundo que puede salvar a la humanidad. Si no fuera tan rabiosamente humilde, escribiría textos maravillosos como sus cartas.

Tanto aprendemos de Liber cada vez que hablamos con él… Por eso, visitarlo en Cochabamba, donde estaba con Nuria, su compañera, a caballo entre el 2007 y el 2008, fue nuevamente como tomar una gran bocanada de aire fresco y cargar las pilas para un buen rato.

07 enero 2008

Raul Lara

Las visitas a Raúl Lara, en su casa de Cochabamba, son siempre una manera de ponerme al día con su obra pictórica y con su familia, y de disfrutar durante unas horas ese ambiente de creatividad que cubre los muros.

Esta vez, Lidia, Ernesto y Fidel me mostraban centenares de carpetas con dibujos recientemente recuperados, que se remontan incluso a los ejercicios más precoces de Raúl como pintor, cuando hizo sus primeras armas guiado por la experiencia de su hermano mayor, Gustavo.

Sobre un caballete, un nuevo cuadro de la serie de Van Gogh. El gran pintor holandés no abandona los hilos de la inspiración de Raúl; esta vez ya no está en Oruro, sino de visita en el valle alto de Cochabamba, saboreando una chicha punateña mientras pinta el paisaje.

En los muros, las figuras sensuales que tanto me gustan, y esos azules profundos y mágicos que marcan una de las etapas más importantes de su obra. Azules intensos como los cielos del altiplano boliviano.